lunes, 28 de mayo de 2012

El Capitalismo según Daniel Bensaïd



No solo se trata de privatizar empresas o servicios, sino también de privatizar la información, el derecho (con el incremento de la relación contractual en detrimento del derecho), el espacio urbano, el agua, el aire, lo vivo.

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Mientras que el imperialismo clásico significaba la expansión de los Estados-nación más allá de sus fronteras, en la fase imperial actual ese fenómeno habría desaparecido para dar paso al "Imperio, supranacional, mundial, total", que ya no es americano (ni europeo ni japonés), sino "simplemente capitalista".
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En la producción capitalista propiamente dicha, la naturaleza se convierte puramente en objeto para el hombre, en una cosa puramente útil (…) Por ello, el torbellino en el que se desenvuelven tanto la producción como la circulación de mercancías conllevan "la explotación de toda la naturaleza".

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Todos los progresos fruto de los descubrimientos científicos y técnicos sirven para el enriquecimiento del capital y no del trabajo.


(Daniel Bensaïd, Cambiar el mundo, Madrid, Diario Público, Biblioteca Pensamiento Crítico, 2010).

martes, 22 de mayo de 2012

Reseña de años abisinios de Eva Chinchilla




Hace unas semanas salió publicada en la revista Culturamas una reseña que escribí sobre años abisinios seguido de canciones yemeníes, de Eva Chinchilla, un libro emocionante e imprevisible, que se aleja de los libros de poesía más domesticados y busca ahondar en el lenguaje y sus limitaciones. Añado el enlace para quien quiera leer la reseña aquí.

lunes, 14 de mayo de 2012

Claire Denis y Richard Dindo: otro tipo de cine es posible


Este mes de mayo la Filmoteca madrileña contiene varias sorpresas que nos permiten, como es habitual en su cartelera, conocer otro tipo de cine que no es el dominante. Quiero destacar, por un lado, el ciclo dedicado a la cineasta francesa Claire Denis, autora de una película tan salvaje como bella: L’Intrus (por cierto, en mi nuevo poemario que saldrá en otoño hay un poema dedicado a este filme). Añado un tráiler de la película.



Por otro lado, ha habido un ciclo -con motivo del Festival Documenta Madrid 2012- sobre el realizador suizo Richard Dindo, autor de numerosos documentales sobre biografías e intelectuales comprometidos con la realidad, y al que tuve la oportunidad de ver ayer mismo, ya que hizo una breve aparición antes de la proyección de su Arthur Rimbaud: une biographie. Dindo dijo algo que me llamó mucho la atención. Que allá por el mes de mayo de 1968, en París, en la Sorbona, había grafitis por todas partes, y en esos grafitis estaban siempre presentes dos personajes históricos: Arthur Rimbaud y Che Guevara. Y él, que todavía no era director de cine –pero ya sabía que lo sería algún día-, se prometió a sí mismo hacer dos películas sobre el poeta y el guerrillero. Han pasado más de 40 años y en otro mes de mayo, ambos autores siguen estando muy presentes por muchas razones. 

Añado el enlace a la programación de la filmoteca aquí.

jueves, 10 de mayo de 2012

Beastie Boys, ese monstruo de tres cabezas

Descubrí a los Beastie Boys más bien tarde. Cuando yo era un chaval, el rock de guitarras y el hard rock lo copaba casi todo, por lo que no fue uno de mis grupos de adolescencia. Y aunque Beastie Boys (formado en Nueva York por Mike D, Ad-Rock y MCA) es una banda gamberra y vacilona yo los descubrí en la treintena o a los veintimuchos y me los tomé muy en serio. Tal vez porque la madurez es otra forma de ser joven (si es que algo significa la madurez). Recuerdo que a mis veinte años, tenía unos amigos que los adoraban. Yo, más que escuchar alguna de sus canciones, las oía, pero mi atención se dirigía por aquellos años a Nirvana, Pearl Jam, Rage Against The Machine, The Offspring, Smashing Pumpkins o incluso Led Zeppelin y The Doors.  Sin embargo, una década después, quedé atrapado por su música ecléctica y única. Me ocurrió algo similar con Sonic Youth. Creo que son dos grupos que muchas veces no entran a la primera. También me ocurrió con Radiohead. Bandas experimentales y poco dadas a las concesiones. Canciones venidas de Marte, que a veces, requieren varias escuchas. Y ahora, estos tres grupos se me antojan imprescindibles, porque desde finales de los 80 y durante los 90 (y todavía en el siglo XXI) han creado lenguajes propios por los que pasan muchos otros grupos. ¿Cuántas bandas suenan a Beastie Boys, a Sonic Youth, a Radiohead? Ellos son creadores. Y no hay muchos.

Una de las cosas que me siguen fascinando de Beastie Boys es la facilidad para mezclar  hip hop, funk, punk y rock y lo naturales que suenan. ¿Es el disco Licensed to Ill rock, punk o rap? ¿Y a quién le importa? A la mierda con las etiquetas. Los riffs de guitarras suenan por encima de los loops, la rabia adolescente se funde con los ritmos. ¿Y Paul's Boutique es un disco de rap? Sí, uno de los mejores, y también es un álbum inclasificable. Los matices sonoros y las capas de samples se apoderan de ti, la inventiva no tiene límites.  ¿Y el álbum Check Your Head? Puro funk, puro old school. Por un lado, trazaban senderos nuevos; por otro, dialogaban con la mejor tradición de rock y punk, como Bob Dylan, Led Zeppelin, Jimi Hendrix, Ramones  y tantísimos otros. Renovación.

Ahí están Red Hot Chili Peppers, Rage Against The Machine, Beck, y un largo etcétera. ¿Cuántas veces he oído a estos grupos sin ser consciente de que antes estaban Beastie Boys? En esa fusión de estilos, crecía el monstruo: punk, hardcore, hip hop, rock, breakbeat, funk, psicodelia, turnablism. Tal vez por ello, muchos raperos no los consideraban un “verdadero” grupo de rap. Normalmente, los puristas son ajenos a los cambios y las experimentaciones. ¿Le gusta Rimbaud o Gombrowicz a un purista de la poesía o la novela? ¿Godard o Tarantino a un purista del cine? ¿Sonic Youth o Yo La Tengo a un purista del rock? ¿A quién le importa? Como decía David Simon (otro monstruo enorme) a propósito de su serie The Wire: “que se joda el lector medio”. Beastie Boys abrieron grietas en el asfalto del rock y del rap, desde su independencia creativa y su sencillez. Pero luego está su música, compleja y monstruosa.

El problema (bendito problema) es que Beastie Boys no es un grupo de rap. Es un grupo de rock. Y de punk. Pero, sobre todo, es Beastie Boys. Entre las etiquetas, corrompidas y gastadas hasta la muerte, ellos se erigían como una banda única en el mundo. Lo demás, son maneras de  nombrar lo innombrable. Bailar en un lago de hielo, cazar moscas con una cuchara.

La prematura muerte por cáncer de Adam Yauch (alias MCA) deja al grupo tocado de muerte. Tenía 47 años. Pero su legado, es enorme. Además, no todas las bandas de rock pueden presumir de haberse adelantado varias décadas a su época, por lo que tendremos Beastie Boys para rato. Beastie Boys, ese monstruo de tres cabezas, seguirá iluminando nuestras miserias.




sábado, 5 de mayo de 2012

La literatura y la forma según Viktor Sklovski



El teórico contemporáneo de la literatura, quien examina la obra literaria y considera lo que llamamos su forma como una especie de envoltorio que hay que penetrar, se asemeja a un jinete que salta el caballo que quiere montar.

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La obra literaria es forma pura; no es ni cosa ni tampoco un material, sino una relación de materiales.

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La forma crea su contenido.

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Las revoluciones literarias no solo crean nuevos valores artísticos, sino que restablecen los viejos.


(Viktor Sklovski, Antología del Formalismo Ruso y el Grupo de Bajtin, VVAA, edición de Emil Volek, Fundamentos, 1992).

miércoles, 2 de mayo de 2012

Silvia Castro Méndez: poemas





09:23

Comparecer de frente a los detalles.
La luz de la no huida.
Envejecer sabiéndose en la máscara.

(Maquillaje)

09:32

Y de pronto el hogar.
Esa mentira
que a golpe
de perfiles nos esconde
lo incierto.


(Gafas)

10:17

Esta aspereza que desgasta el zapato
es una piel sin viernes,
una carcasa de animal primitivo.

Desde el uno hasta el cielo
cuatro niñas le estampan
con tiza
una escalera.

Y entre un salto y el otro
el cemento se traga la voz de los ancianos.


(Acera)

(Silvia Castro Méndez, Señales en tiempo discreto, Ediciones Amargord, 2011).