jueves, 14 de julio de 2011

Henri Michaux: Paisajes

Paisajes

Paisajes apacibles o desolados.

Paisajes del camino de la vida más que de la superficie de la Tierra.

Paisajes del Tiempo que pasa lentamente, casi inmóvil, y a veces parece ir para atrás.

Paisajes de pedazos, de nervios desgarrados, de saudades.

Paisajes para cubrir las heridas, el acero, el resplandor, el mal, la época, la soga al cuello, la movilización.

Paisajes para abolir los gritos.

Paisajes como cuando uno se echa una sábana sobre la cabeza.


Paysages

Paysages paisibles ou désolés.

Paysages de la route de la vie plutôt que de la surface de la Terre.

Paysages du Temps qui coule lentement, presque immobile et parfois comme en arrière.

Paysages des lambeaux, des nerfs lacérés, des saudades.

Paysages pour couvrir les plaies, l’acier, l’éclat, le mal, l’époque, la corde au cou, la mobilisation.

Paysages pour abolir les cris.

Paysages comme on se tire un drap sur la tête.


(Henri Michaux, L'espace du dedans, París, Gallimard, 1966. Versión de C. H.).

2 comentarios:

  1. Hace un par de años escuché una conferencia de Chantal Maillard, poeta y persona muy interesante, sobre Micheaux y Santoka. ¿Qué hay de uno en otro?, se preguntaba Maillard.

    Uno poeta de vanguardia y el otro renovador del haiku, ambos huyendo de su entorno y de sí mismos. Inadaptados, proyectaban su persona en la escritura, se “aherrojaban “ en la escritura.

    Ambos quieren reducir la escritura a lo mínimo, uno con sus haikus y el otro con sus trazos (“Par de Traits”); signos sin significantes, “verbo sin sustantivo, como si algo caminase sin piernas, acción sin sujeto” decía Maillard.

    Micheaux experimentó con las drogas para conocer sus efectos, para sorprender misterios ocultos en otra parte; no por placer sino para aprender, como medio para llegar al conocimiento.

    Deshacerse del lenguaje, ir al signo. “El camino tiene que ver con la eliminación del lenguaje”.
    El término de un viaje: mientras termino de morirme/ la yerba/ llueve.

    Me parece que me he extendido demasiado, no es fácil reducirse al trazo :)
    Un abrazo veraniego,
    Estela

    ResponderEliminar
  2. Hola Estela, qué interesante lo que dices...

    La verdad es que no conozco mucho de Michaux, pero lo he descubierto hace unos meses y me está fascinando. Necesito leerlo poco a poco, porque su voz es muy intensa. Me gusta lo que dices sobre que eran inadaptados, porque muchas veces son los que saben "ver" y llegar a "conocimiento" mejor que nadie. Este verano me propongo leer más a Michaux (aunque creo que es un autor que me va a llevar años, "heureusement") y gracias por descubrirme a Santoka, porque me gustan mucho los haikus, así que lo leeré también.

    La idea de "deshacerse del lenguaje, ir al signo" es muy fuerte, pocos lo pueden lograr, y creo que tanto con los haikus como la poesía de Michaux se acerca a eso.

    Besos y buen verano.

    ResponderEliminar